A través de este libro, Juan busca demostrar que Jesús es Cristo, el hijo de Dios. A partir del capítulo uno y después de presentar su encarnación, Jesús es presentado con siete títulos: El Cordero de Dios. El hijo de Dios, Rabí (maestro), el hijo del Hombre, el Mesías, el rey de Israel y Jesús de Nazareth.
En Juan 6:35 se presenta como YO SOY el pan de vida
Juan 8:12 YO SOY la Luz del mundo
Juan 10:9 YO SOY la Puerta de las ovejas
Juan 11:25 YO SOY La resurrección
Juan 14:6 YO SOY el camino, la verdad y la vida
Juan 15: 1 YO SOY la vida verdadera
El autor, sin duda alguna busca demostrar la deidad de Cristo y como Él es el cumplimiento a las profecías que se le habían dado a Israel. En el contexto inmediatamente anterior al pasaje que estudiaremos en esta mañana, Jesús está instruyendo a sus discípulos acerca de los que significaba que Él fuera la vid verdadera y las implicaciones que esto representaría para ellos como sus seguidores:
V5- Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
Para el Señor era importante que sus discípulos entendieran que permanecer a pesar de lo que vendría, sería una muestra de la veracidad de su llamado y salvación eterna. Sin embargo, a partir del versículo 12, las palabras de Jesús van direccionadas a expresarles un mandato que sería esencial no solo para la vida de los discípulos en ese momento, sino para todo aquel que creerían en Jesús como su Señor y Salvador. Las palabras del Señor Jesús en este extracto de Juan 15: 12-17, fueron probablemente únicas en todas las escrituras, Jesús llama a sus discípulos: amigos. En tal virtud, estudiaremos este pasaje organizado en tres puntos principales:
1- Los amigos de Jesús aman como él los amó (12-13)
2- Los amigos de Jesús obedecen a sus mandatos (14)
3- Los amigos de Jesús gozan de privilegios (15-17)