Daniel 2:29-49
Vivimos en un mundo convulsionado políticamente. Después de la Segunda Guerra Mundial y la guerra fría, vimos cómo la política es uno de los principales causantes de muertes y sangre en la historia. Gobernantes malvados, dictadores perversos de corazón y en obras, hacen que nos preguntemos ¿está Dios en control de los gobiernos de este mundo? ¿Le importa a Dios la manera en que cada gobernante y poderoso desarrolla una política en una inacción?
El pasaje que veremos hoy, es la evidencia de que Dios gobierna y lo hace especialmente sobre los reyes y gobernantes de este mundo.
Después de haber orado junto a sus amigos para recibir una respuesta teniendo una sentencia de muerde sobre sus hombros. Daniel, después de alabar y dar gloria a Dios por ser el que revela los misterios y que no fue su habilidad particular, ahora está listo para presentarse delante del rey y declarar el misterioso sueño y su interpretación.
Veremos así nuestro texto a la luz de los siguientes tres puntos:
Un sueño misterioso (29-35)
Una revelación gloriosa (36-45)
Una alabanza necesaria (46-49)