Gozo en el evangelio | Filipenses 1:1-26

Gozo en el evangelio
Filipenses 1: 1-26

La iglesia en la ciudad de Filipos, capital de Macedonia (actualmente Grecia) fue la primera iglesia
plantada en suelo europeo por Pablo en su segundo viaje misionero, evento relatado en hechos
capítulo 16. De acuerdo a este pasaje, la falta de una sinagoga en esta ciudad hizo que el apóstol y
sus acompañantes predicaran el evangelio junto al cauce de un río. El relato de Hechos 16: 11-15,
presenta una realidad con respecto a la condición del evangelio en este lugar. Según las tradiciones
judías, se requerían a 10 hombres para formar una sinagoga, pero en ese momento solo algunas
mujeres se reunían a orar y estudiar las escrituras a la ribera del río.


Allí Dios inició la iglesia en esta ciudad, caracterizada por ser un paso obligatorio entre las
poblaciones del sur de Asia y Roma, capital del Imperio. Sus habitantes, en mayoría eran retirados
del ejército que encontraban en Filipos un lugar que les otorgaba la ciudadanía romana y los
beneficiaba con algunos privilegios, entre ellos la exención de impuestos.


En los versículos 1 de este capítulo, Pablo se presenta como el autor de la carta y junto a Timoteo se
hacen llamar Siervos de Cristo. A pesar de que Pablo quería y trataba a Timoteo como su hijo, en el
saludo de la carta a los Filipenses se presenta como esclavos de Cristo, una muestra de la identidad
que los unía. ‘De Cristo Jesús’ era la marca que Pablo usaba para declarar su unidad con los otros
creyentes.


Pablo le escribe esta carta de manera personal y con mucho gozo a los Filipenses, Santos en Cristo
Jesús, pero también a sus pastores y diáconos. Esto nos revela el gobierno de la iglesia en Filipos,
basada en una pluralidad de obispos y servidores conforme al modelo de la Iglesia Primitiva.
Probablemente el apóstol le escribió esta carta en el año 61 D. de C. en una prisión en Roma, que al
conocer lo que Dios estaba haciendo con los Filipenses, junto a Timoteo plasma con gran amor y
gozo las palabras de esta carta. Pablo en toda la epístola, menciona unas 16 veces la palabra ‘gozo’,
tema principal de la misma.


Basado en ese sentimiento de alegría que inundaba el corazón de Pablo por la obra del evangelio en
estos hermanos en Cristo, estudiaremos los versículos 3-26 de este primer capítulo bajo los
siguientes 3 puntos:


1- Gozo en el evangelio por la obra de Cristo en la iglesia (v3-11)

2- Gozo en el evangelio por el avance del Reino (v12-20)

3- La fuente del gozo en el evangelio (V 21-26)

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